¿Te ha pasado que tomas un medicamento y de repente te cuesta recordar el nombre de un amigo, olvidas citas, o no puedes concentrarte en una conversación? No eres el único. Muchos fármacos que se prescriben con buena intención pueden estar afectando tu memoria y tu capacidad de enfocarte, sin que lo sepas. Algunos son tan comunes que los tomas sin pensar: pastillas para dormir, antidepresivos, medicinas para la presión, o incluso antihistamínicos de venta libre. Lo preocupante es que estos efectos no siempre se mencionan en los folletos, y muchos médicos no los revisan a menos que el paciente lo mencione primero.
Los medicamentos más comunes que borran recuerdos
Los benzodiazepinas, como el alprazolam o el diazepam, son los más conocidos por causar pérdida de memoria a corto plazo. Se usan para la ansiedad, el insomnio o los espasmos musculares, pero bloquean la formación de nuevos recuerdos en el hipocampo. Un estudio de la Universidad de Boston en 2024 encontró que personas mayores de 65 años que usaban benzodiazepinas durante más de tres meses tenían un 43% más de riesgo de desarrollar déficit cognitivo leve. No es una pérdida total de memoria, pero sí dificultad para recordar qué hiciste ayer, dónde pusiste las llaves, o incluso qué comiste en el desayuno.
Otro grupo silencioso son los anticolinérgicos. Estos se encuentran en muchos medicamentos para alergias (como la difenhidramina), para la vejiga hiperactiva (como la oxybutinina), o incluso en algunos antidepresivos tricíclicos (como la amitriptilina). Funcionan reduciendo la acetilcolina, una sustancia química esencial para aprender y recordar. Un estudio publicado en JAMA Neurology en 2023 mostró que tomar anticolinérgicos durante más de tres años se asoció con un 54% mayor riesgo de demencia. Muchos pacientes no saben que el antihistamínico que toman para el resfriado tiene este efecto.
Los estatinas, medicamentos para bajar el colesterol, también han generado controversia. Algunas personas reportan confusión mental, olvidos frecuentes o dificultad para encontrar palabras. Aunque la FDA no ha confirmado una relación directa, varios estudios observacionales (como el de la Clínica Mayo en 2025) sugieren que hasta un 10% de los usuarios experimentan síntomas cognitivos leves, que desaparecen al dejar el medicamento. Si notas que te cuesta más pensar después de empezar a tomar estatinas, habla con tu médico antes de dejarlo por tu cuenta.
Antidepresivos y antipsicóticos: ¿mejoran el estado de ánimo pero empeoran la mente?
Los ISRS (inhibidores selectivos de la recaptación de serotonina), como la sertralina o el escitalopram, son los más usados para la depresión y la ansiedad. Aunque mejoran el estado de ánimo, muchos pacientes dicen que se sienten "embotados". La memoria se vuelve lenta, la concentración se desvanece, y la motivación para hacer cosas simples se pierde. Esto no es un efecto secundario raro: un metaanálisis de 2024 en The Lancet Psychiatry encontró que el 38% de los pacientes con depresión que tomaron ISRS reportaron déficit de atención y dificultad para recordar información nueva.
Los antipsicóticos, como la risperidona o la olanzapina, usados para esquizofrenia o trastorno bipolar, tienen efectos aún más marcados. Reducen la actividad en áreas del cerebro relacionadas con la atención y la memoria de trabajo. Muchos pacientes mayores con demencia reciben estos fármacos para controlar agitación, pero el riesgo de empeorar la cognición es alto. La Asociación Americana de Psiquiatría recomienda evitarlos en demencia si es posible, porque los beneficios suelen ser menores que los daños.
Medicamentos para el sueño: el peor enemigo de la memoria nocturna
El sueño es cuando tu cerebro consolida los recuerdos. Si un medicamento te impide entrar en las fases profundas del sueño, estás interrumpiendo ese proceso. Los hipnóticos como el zolpidem (Ambien) o el eszopiclona (Lunesta) no solo te hacen dormir, sino que también bloquean la actividad cerebral necesaria para fijar recuerdos. Un estudio de la Universidad de California en 2025 encontró que personas que usaban estos medicamentos tres veces por semana durante más de seis meses tenían una memoria episódica (recuerdos de eventos personales) un 27% más débil que las que no los usaban.
Y no solo son los fármacos de receta. Muchos remedios para dormir de venta libre contienen antihistamínicos, como la difenhidramina. Aunque parecen inofensivos, son anticolinérgicos. Toman una pastilla para dormir, se levantan con la cabeza pesada, y luego no recuerdan lo que hicieron la noche anterior. No es un "efecto secundario", es un efecto directo.
¿Qué pasa con los medicamentos para la presión arterial?
Los beta-bloqueadores, como el propranolol o el atenolol, son muy usados para la hipertensión y la taquicardia. Pero también cruzan la barrera hematoencefálica y reducen la actividad del sistema nervioso central. Esto puede hacer que te sientas lento, confundido o con "niebla mental". Un estudio en Neurology en 2024 comparó a 12.000 pacientes con hipertensión y encontró que quienes tomaban beta-bloqueadores tenían un 22% más de probabilidades de presentar deterioro cognitivo que quienes tomaban otros antihipertensivos como los IECA o los ARA II.
Los diuréticos, especialmente los tiazídicos, pueden causar desequilibrios de electrolitos (como bajo sodio o potasio), lo que también afecta la función cerebral. Si te sientes mareado, confundido o con dificultad para pensar después de empezar un diurético, pide un análisis de sangre. No es normal sentirse así.
¿Qué puedes hacer si sospechas que un medicamento te está afectando?
Primero: no dejes de tomar ningún fármaco por tu cuenta. Algunos, como los antidepresivos o los beta-bloqueadores, pueden causar síntomas de abstinencia peligrosos si se interrumpen bruscamente.
Segundo: lleva una lista detallada de todos los medicamentos que tomas -incluyendo suplementos, hierbas y productos de venta libre- y lleva esa lista a tu médico. Muchas veces, los efectos cognitivos se confunden con el envejecimiento, pero pueden ser reversibles.
Tercero: pregunta si hay alternativas. Por ejemplo:
- ¿Puedes cambiar de antihistamínico? La loratadina o la cetirizina tienen menos efecto anticolinérgico que la difenhidramina.
- ¿Hay un antidepresivo diferente que no cause embotamiento? La bupropión, por ejemplo, suele tener menos efectos sobre la memoria.
- ¿Puedes usar terapia cognitivo-conductual en lugar de benzodiazepinas para la ansiedad? Funciona mejor a largo plazo y no daña la memoria.
Algunos médicos usan la herramienta Beers Criteria, una lista actualizada por la Sociedad Americana de Geriatría que identifica medicamentos de alto riesgo en personas mayores. Pídelo. Si tu médico no la conoce, es momento de buscar otro.
¿Cuándo debes preocuparte?
No es normal olvidar dónde pusiste las llaves una vez al mes. Pero si:
- Te olvidas de nombres de personas cercanas con frecuencia
- Te pierdes en lugares conocidos
- No puedes seguir una conversación porque se te va el hilo
- Te cuesta hacer cuentas simples o seguir recetas
-eso sí es una señal de alerta. Y si esos síntomas aparecieron después de empezar un nuevo medicamento, es casi seguro que están relacionados. No esperes a que empeore. Lleva tu lista de medicamentos y una descripción clara de lo que te pasa. Pide una evaluación cognitiva básica. Puede ser tan simple como un test de Montreal (MoCA), que dura 10 minutos y se hace en la consulta.
Lo que no te dicen: los suplementos también pueden afectar
Algunos suplementos que la gente toma "para la memoria" en realidad pueden empeorarla. El melatonina en dosis altas (más de 5 mg) puede causar somnolencia diurna y confusión. El valeriana y la pasiflora tienen efectos sedantes similares a las benzodiazepinas. Y el ginkgo biloba, aunque se vende como mejorador cognitivo, no tiene evidencia sólida de beneficio y puede interactuar con anticoagulantes, aumentando el riesgo de hemorragias.
La regla es simple: si no lo receta un médico, pregúntale si puede afectar tu memoria. No todo lo que es "natural" es seguro.
¿Hay medicamentos que mejoran la memoria?
Algunos fármacos están aprobados para tratar enfermedades como el Alzheimer: la donepezil, la rivastigmina o la memantina. Pero no son "mejoradores de memoria" para personas sanas. No funcionan como cafés inteligentes. Tomarlos sin diagnóstico no te hace más listo, y puede causar efectos secundarios como náuseas, mareos o incluso aceleración del ritmo cardíaco.
Lo que sí funciona para mejorar la memoria y la concentración no es un medicamento: es dormir bien, moverte, controlar la presión arterial, comer verduras y frutas, y mantener relaciones sociales. Estos hábitos protegen tu cerebro más que cualquier píldora.
¿Pueden los medicamentos para el colesterol causar pérdida de memoria?
Sí, algunos pacientes reportan confusión mental, dificultad para encontrar palabras o olvidos leves al tomar estatinas. Aunque no todos los estudios lo confirman, la FDA reconoce que estos efectos pueden ocurrir en hasta un 10% de los usuarios. Si notas estos síntomas, no dejes el medicamento sin consultar. Pide una evaluación y discute si puedes cambiar a otro tipo de fármaco para el colesterol.
¿Qué medicamentos para el resfriado afectan la memoria?
Muchos medicamentos para el resfriado de venta libre contienen difenhidramina o clorfeniramina, que son anticolinérgicos. Estos fármacos reducen la acetilcolina, una sustancia clave para la memoria y la atención. Puedes sentirte somnoliento, confundido o con "niebla mental". Busca versiones sin antihistamínicos, o usa paracetamol y suero fisiológico en su lugar.
¿Es normal olvidar cosas con la edad, o puede ser por los medicamentos?
Olvidar dónde pusiste las gafas de vez en cuando es normal. Pero si te olvidas de nombres de familiares, pierdes el hilo de conversaciones, o te pierdes en tu barrio, eso no es parte del envejecimiento normal. Es más probable que sea un efecto de medicamentos, especialmente si empezaron después de empezar un nuevo fármaco. Revisa tu lista de medicamentos con tu médico antes de asumir que es "solo la edad".
¿Pueden los antidepresivos hacerme más olvidadizo?
Sí, especialmente los ISRS como la sertralina o el escitalopram. Hasta un 38% de los usuarios reportan dificultad para concentrarse y recordar información nueva. Esto no significa que el medicamento no funcione, pero sí que puede estar embotando tu mente. Si esto te afecta en el trabajo o en tu vida diaria, habla con tu médico. Puede haber alternativas como la bupropión, que tiene menos efectos cognitivos.
¿Qué debo llevar a la consulta médica si sospecho que un medicamento me afecta la memoria?
Lleva una lista completa de todos los medicamentos que tomas: con nombres comerciales y genéricos, dosis, y cuánto tiempo los llevas tomando. Incluye suplementos, hierbas, analgésicos de venta libre y remedios para dormir. También anota cuándo empezaste a notar los síntomas y qué cosas específicas te cuestan más (recordar nombres, seguir instrucciones, etc.). Esto ayuda al médico a identificar el culpable mucho más rápido.