Para llegar a Mallorca, una de las islas más visitadas del Mediterráneo y puerta de entrada al archipiélago balear. También conocida como Mallorca, es un destino que muchos estadounidenses eligen por su clima, playas y vida local auténtica. No es un viaje corto, pero tampoco es imposible: cada año, miles de personas hacen este recorrido sin problemas, y tú puedes hacerlo también. Lo que importa no es la distancia, sino saber qué opciones tienes, cuánto cuestan realmente los vuelos y qué aeropuerto te espera al llegar.
El principal punto de entrada es el aeropuerto de Palma de Mallorca, el tercer aeropuerto más concurrido de España, con conexiones directas desde ciudades como Nueva York, Miami, Chicago y Boston. También conocido como Aeropuerto de Palma (PMI), es el único que recibe vuelos transatlánticos directos. Si buscas ahorrar, a veces es más barato volar primero a Madrid o Barcelona y luego tomar un vuelo de conexión, pero eso suma horas y complicaciones. Los vuelos directos suelen operar entre abril y octubre, con frecuencias más altas en verano. Fuera de temporada, los vuelos con escala se vuelven la norma, y los precios pueden subir hasta un 40% si los reservas en el último momento.
El costo promedio de un billete de ida y vuelta desde EE.UU. a Mallorca ronda los 800 a 1.200 dólares, dependiendo de la ciudad de origen, la época del año y cuánto adelante lo compres. Los precios más bajos suelen estar entre marzo y mayo, o en septiembre, cuando el clima sigue siendo bueno pero las multitudes han bajado. Evita julio y agosto si buscas ahorrar: esos meses son los más caros y los más llenos. También debes tener en cuenta que el equipaje facturado no siempre está incluido en los billetes low cost, así que revisa siempre las condiciones antes de pagar. Al llegar, el transporte al hotel es sencillo: hay autobuses públicos, taxis y servicios de traslado privado. No necesitas alquilar un coche desde el aeropuerto a menos que planees explorar la isla con libertad.
Lo que mucha gente no cuenta es que llegar a Mallorca no es solo cuestión de comprar un billete. Es también prepararte para un cambio de huso horario (Mallorca está 6 horas adelantada respecto a la costa este de EE.UU.), para el idioma (aunque en zonas turísticas hablan inglés, aprender unas palabras en español o catalán te ayuda mucho), y para la cultura local (los mallorquines disfrutan de sus ritmos, sus mercados, sus fiestas y sus tardes largas). No vienes solo por la playa. Viene por la isla entera.
En las siguientes páginas encontrarás guías reales sobre cuándo ir, qué alojamiento elegir, cómo evitar gastos ocultos y hasta qué hacer en octubre, cuando el mar aún está cálido y la isla se vacía. Todo lo que necesitas para planear tu viaje sin sorpresas, sin estrés y con la cabeza bien puesta.
Guía completa para viajar a Mallorca desde Estados Unidos: vuelos directos, paquetes turísticos, requisitos, mejores épocas y consejos prácticos para planificar tu viaje sin sorpresas.